Sueñen, aunque el sueño parezca imposible.
Luchen, aunque el enemigo parezca invencible.
Soporten el dolor aunque este parezca insoportable.
Corran por donde el bravo no osa ir.
Transformen el mal en bien, aunque sea necesario caminen mil millas.
Amen lo puro e inocente, aunque sea inexistente.
Resistan aún cuando el cuerpo no resista más.
Y al final… alcanzarán aquella estrella,
aunque ésta, parezca inalcanzable.
- Daisaku Ikeda -
Últimamente ando poco comunicativo.
ResponderEliminarAsí que así seguira siendo, hasta que a la pluma le de ganas de correr un poco más.
Corto y conciso,
en estos días de desafíos:
objetivos y metas por cumplir.
Ahí vamos.
Saludos!
Mati.
Volvé.
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