sábado, 9 de junio de 2012

Sobre la ciudad...



Dicen que se subió a su burbuja, y salió a flotar sobre la ciudad.
Vivía una de esas caminatas y uno de esos estados de conciencia,
que le daba el inmenso poder de poner toda la ciudad en pausa.
Una guitarra acústica y un poco de poesía acompañaban su danza;
su lento flamear (casi imperceptible), sobre las baldosas de cemento.
Y ahí estaba él, una vez más, contra viento y marea.
Entendiendo, comprendiendo, ¿yendo al choque o escapando?,
con todo lo que la vida le estaba por traer.
Por todos esos días, que aún quedaban por venir...
con sueños, luces, oscuridad:
esa montaña rusa de volver a sentirse vivo.
Y por más que le pesara
(y lo calmara al mismo tiempo)
ese sospechoso y casi olvidado
olor a besos y flores.


LokoPoeta